Taller cooperativo:
Para esta actividad he elegido el texto “Soy un pez”, de los
autores: J.L. García Sánchez, M.A. Pacheco, y el ilustrador José Ramón Sánchez.
Es de la editorial Primera Biblioteca Altea, y es la 5º edición de Febrero de
1978.
He escogido este texto porque según recuerdo de mi infancia,
y me ha recordado siempre mi madre, era un texto que nos leía ella, a mi
hermano y a mí, justo antes de irnos a dormir. En este texto se cuenta la
historia de un pez que vive en el fondo del mar, y narra el proceso que vive
hasta llegar a un acuario. Además el protagonista, el pez, explica los
diferentes peces que existen en el mar, así como respiran, se reproducen, se
alimentan, etc.
El proceso que he elegido para llevar a cabo esta actividad
es la estrategia de narración, ya que al prepararme para poder llevarla a cabo,
he tenido que hacer lo primero de ello, es realizar varias lecturas del libro.
Pues en la primera lectura he podido observar que existían varias frases
simples que no eran del todo adecuadas para los niños de infantil.
Además de iniciar el proceso de preparación de la estrategia,
realizando diversas lecturas del texto, he subrayado y apuntado las frases que
en mi opinión se deben modificar, para que cuando lo llevara a cabo el resultado
fuera lo más óptimo posible.
Después de leer y apuntar las frases menos adecuadas, realice
otra lectura más, para aprenderme bien en sí el contexto del texto.
Posteriormente preparé en un folio, lo que iba a exponer a mis compañeras. Y
por último, y a partir de lo que me había preparado realice un par de ensayos
mirando a un espejo, para saber si la coordinación entre lo que narraba, y el
paso de las imágenes iba acorde.
Para asegurarme de ello, escogí a un familiar y le expuse la
narración del texto Soy un pez, tal como si fuera un niño de infantil, y la
opinión que me dio del proceso, fue que lo que iba contando con mis palabra se
asimilaba a las imágenes que iba observando del libro.
Por último se lo expuse a mi compañera Patricia Sánchez
Pérez, y aunque comencé algo nerviosa, pude desarrollar la actividad con
facilidad. La fui narrado la historia del texto, con las modificaciones que
había considerado apropiadas, y según iba avanzando la historia iba pasando las
imágenes. Después de finalizar, mi compañera me comento que le había gustado
como lo había realizado, y que según se iba fijando las imágenes, iba
observando que lo que la narraba tenía relación entre lo uno y lo otro; por lo
que me sentí muy satisfecha del resultado de la elaboración de esta actividad.
Esta actividad me ha servido de ayuda y de una gran
experiencia, para poder saber en el futuro como poder prepararme los cuentos o
libros que escoja, para emplear la estrategia de narración; aunque espero que
al ir cogiendo experiencia a lo largo de los años como maestra, pueda realizar
este tipo de actividades de una forma más rápida, y también mejor de lo que me
ha supuesto ahora. Piensa que esta actividad nos ha venido muy bien para poder
exponerlo en las próximas prácticas que hagamos, o también en el caso de que
tengamos que realizar una lectura de un cuento, cuando veamos que el texto no
nos parece del todo adecuado, poder realizar una improvisada narración para los
alumnos; aunque supongo que esto solo podremos hacerlo bien con los años de experiencia.
Para poder llevar a cabo esta actividad en un aula de
infantil, personalmente realizaría el mismo proceso de preparación, y luego en
el aula la realizaría en el tiempo de lectura, o si este tiempo no existiera en
el horario escolar, lo realizaría en la asamblea para poder comenzar la mañana
de forma motivadora. Anteriormente y si fuera posible, habría hablado a los
niños de los peces, o de los elementos marinos, todo ello dependiendo del grado
de conocimiento sobre el tema, pero eso se podría averiguar previamente con una
sesión de preguntas.
Después de haber realizado estas sesiones para saber el grado
de conocimiento, o explicarles también un poco sobre el tema, colocaría a los
alumnos como en la asamblea para que así todos pudieran observar las
ilustraciones de la mejor manera. Luego comenzaría la actividad, y esperaría
que si tuvieran que interrumpir por dudas o curiosidades sobre la narración
fuera levantando la mano. Creo que es importante y beneficioso para los niños
que ellos mismo realicen tanto en el proceso de la narración como al final
todas las dudas o curiosidades que tengan, siempre y cuando dentro de un orden.
Para finalizar la sesión, realizaría una serie de preguntas
para averiguar si les ha gustado, o no, si les ha quedado alguna duda, o si
algo les ha supuesto muy duro, para poder realizar modificaciones en la
actividad para la siguiente sesión, ya sea con el mismo texto o con otro
diferente.
Para terminar con esta actividad me gustaría comentar
el proceso y realización que ha hecho mi compañera Patricia Sánchez Pérez en
este taller. Ella ha seleccionado la estrategia de narración con el texto “¿Eso
es lo que hacen los amigos?”, que consiste en el camino que recorren un mono y
un elefante para conseguir la amistad. Cuando desarrollo su actividad me
pareció muy interesante el tema que había escogido, la amistad; en el proceso
pude observar como lo que ella iba narrando tenía un orden y sentido con las
imágenes que me mostraba, al igual que su expresión y lenguaje era fluido y muy
sencillo, por lo que me pareció adecuado para la utilización en una aula de
infantil. Al final de su actividad pude apreciar el valor que intentaba
transmitir el texto, el cual es que el proceso para conseguir una amistad, es
importante el cómo se realice y se lleve a cabo, y al mismo tiempo que hay que
cuidar aquella persona; por lo que me pareció un valor importante que deben
tener en cuenta los niños de infantil.
Bien, el problema es que el texto que has elegido es de carácter paraliterario didáctico (enseña cosas sobre la vida de los peces) y el enfoque de las actividades previas y posteriores no se ajusta al placer de la literatura sino más a un aprendizaje sobre el medio físico.
ResponderEliminar